sábado, 8 de mayo de 2010

Indices de inteligencia financiera

“En un país bien gobernado, la pobreza es algo que avergüenza.
En un país mal gobernado, la riqueza es algo que avergüenza.”
Confucio.


Cuando se hacen test de inteligencia, se debe cuidar si tales pruebas en realidad están midiendo la inteligencia, o simplemente la capacidad para realizar exitosamente los test de inteligencia. Cuando se posee inteligencia financiera, hay ciertos parámetros adecuados para medirla, o por lo menos para medir el desempeño financiero individual. Esto lo podemos hacer mediante relaciones o ratios entre diversos aspectos de nuestros estados financieros personales.

¿Que tal si no somos unos genios financieros pero simplemente cumplimos con los parámetros establecidos y lo aparentamos? ¿Si hacemos como el mono que escogía la acciones que había que vender o comprar y su índice de éxitos era igual o superior al de los genios de la bolsa de valores?.

Uno de los principales índices que hay que tener en consideración es el de la relación entre el ingreso y el capital, se refiere básicamente a la cantidad de activos financieros que hay que poseer a la hora de retirarse de manera de poder vivir indefinidamente con los intereses de los ahorros y el producto de las inversiones. Esto cobra mucha importancia en la actualidad, sobre todo que con los avances de la ciencia la expectativa de vida se han incrementado muchísimo y en consecuencia es posible que viva una gran cantidad de años después de jubilarse y debería procurar que en los mismos no sea una carga para su familia.

Actualmente la expectativa de vida en los países desarrollados se está acercando a los 80 años, simplemente imagine que entra al mercado de trabajo a los 21 años, trabaja durante 39 y se jubila a los 60, todavía le quedan 20 años al menos para disfrutar de su edad dorada, esta es una de las razones por las cuales los sistemas de seguridad social están con serios problemas, cuando se crearon en el siglo 19 la expectativa era que la persona viviera unos pocos años después de su jubilación, ahora el seguro social debe darle muchos años de pensión a un cantidad cada vez mayor de jubilados, en consecuencia si está contando con el seguro social para subsistir en su vejez, está metido en un serio problema.

En general para calcular el capital al momento del retiro se deben tomar en consideración los siguientes elementos:
- Ahorros en entidades financieras.
- Valor de rescate de las pólizas de vida.
- Valor de los inmuebles generadores de renta, inmuebles comerciales.
- Valor de mercado de sus activos invertidos en la bolsa y en compañías privadas.

Puede observar que no está incluida la vivienda, ni los vehículos ni las joyas, pues éstos no son activos generadores de renta, si su principal activo es su vivienda, Ud., está en problemas; si su principal activo es su vehículo …pues está en muy serios problemas ¡¡¡, sobre todo si se esta acercando a la edad de jubilación.

En términos generales se estima que la relación de activos financieros a ingresos antes del retiro debe ser de 12 a 1, es decir que al momento de su retiro debería tener ahorrados 12 años de su ingreso anual, excluyendo su vivienda y su vehículo. Para ponerlo sencillo, si su ingreso mensual es de 1.000 incluyendo bonificaciones, prestaciones y demás emolumentos pues entonces su ingreso anual será de 12.000, para tener un retiro digno debería tener ahorrados unos 12 años de ingresos o unos 144.000 al momento de retirarse.

Esto le permitirá retirar cada año para sus gastos de vida el 5% de su capital, es decir unos 7.200 anuales y seguir incrementando sus activos financieros, evidentemente no tendría los mismos ingresos antes del retiro pero estos se deberían complementar con su pensión del seguro social de manera que mas o menos pueda mantener su nivel de vida indefinidamente.

Ahora bien, ¿como en 39 años de vida laboral se pueden ahorrar 12 años de ingresos totales?, ¿acaso no hay que comer y vestirse y pagar hipoteca y las tarjetas de crédito? Pues claro que sí y si lo miramos de una manera simplista se diría que habría que ahorrar un increíble 30% de los ingresos para poder llegar a esa relación de 12 a 1 entre capital e ingresos, aunado a ello, los ingresos que se obtienen al inicio le la edad laborar son inferiores a lo que se perciben al final de la misma, por lo que pareciera que al inicio pues habría que ahorra inclusive un porcentaje superior. A todo esto simplemente hay que remitirse a lo señalado por Albert Einstein: “El interes compuesto es la fuerza mas poderosa de la galaxia.”

El interés compuesto tiene como variable fundamental el tiempo, si una persona de 20 años deposita a interés compuesto la cantidad de 100 mensuales durante 40 años a una tasa del 10% anual, tendrá al final 559.460, aquí podemos ver que el capital aportado fue de 48.000 pero el resultado al final es mas de 11 veces superior.

Ahora imaginemos que una persona de 40 años ahorra mensualmente 200 durante veinte anos a una tasa del 10% anual, su capital aportado será igualmente de 48.000, pero sus ahorros finales serán de sólo 144.797. Es decir que el mismo capital y al mismo interés del ejemplo anterior pero el resultado final fue de menos de un tercio.

De lo anterior se desprende que si no ha empezado ahorra lo debe empezar a hacer ya, pues el tiempo es de vital importancia para poner a funcionar la maravilla de los intereses compuestos.

Otro índice de suma importancia es la relación entre ingresos y ahorros, en uno de los libros de mas éxito dentro del mundo de la planificación financiera personal, llamado “El Hombre mas Rico de Babilonia“, el cual he tenido el placer de regalar a muchos amigos y conocidos y por los efectos que he visto en ellos aparentemente lo han utilizado para nivelar alguna mesa que tenia una pata mas corta o para alimentar alguna fogata a la orilla de la playa, se habla que el secreto de la riqueza es ahorrar al menos el 10% de los ingresos anuales.

En la actualidad, este consejo tiene vigencia pero en realidad constituye la cantidad mínima que se debería ahorrar anualmente, la realidad es que un 15% de los ingresos anuales se deberían dedicar al ahorro e inversión. Ahora bien ¿como se logra esto?, pues muy sencillo, si lo comparamos con hacer ejercicios. Hace algunos años cuando empecé a ejercitarme pues no podía mantener el ritmo en la elíptica por mas de 7 minutos, empecé a practicar con regularidad y ahora puedo estar una hora sin problemas. Igual es con el ahorro, empiece con el 1% el primer mes y vaya aumentando, al principio puede ser incómodo o inclusive doler un poco, al igual que el ejercicio, pero se va a ir acostumbrando, cuando le llegue un aumento de sueldo, pues simplemente destínelo al ahorro y mantenga su nivel de vida como si tuviera el sueldo o los ingresos anteriores.

Pues me pueden decir que básicamente este índice los está condenado a tener una vida miserable, pues no, es simplemente gratificación diferida, si ahorra 100 de su primer sueldo y los coloca a interés compuesto del 10% anual, sin tocarlos, cuando llegue su edad de jubilación se habrán convertido en 4.526. Para decirlo en palabras muy coloquiales todas las cantidades que Ud., no dedique al ahorro e inversión constituyen una matanza diaria de la gallina de los huevos de oro.

Ese gasto superfluo que hizo en su juventud no sólo le costó lo que pagó en ese momento, sino todos los intereses compuestos que pudo haber generado, es decir en el ejemplo que di anteriormente si en vez de ahorrar 100 se los hubiera gastado en cigarrillos o en tragos con sus amigos, justamente para celebrar su primer sueldo, el costo a futuro fue una pérdida de 4.526.

¿Quiere esto decir que tener inteligencia financiera significa tener una vida miserable? No, simplemente significa que ahorre aunque sea el 10% de sus ingresos, es algo que cualquiera puede hacer y que le generará resultados tangibles y concretos, es definitivamente el mejor consejo financiero que cualquiera pueda darle. Aquí puede hacer como el príncipe de Maquiavelo, no es necesario que tenga inteligencia financiera, simplemente aparente que la tiene y ahorre todo lo que pueda !!!

martes, 5 de enero de 2010

Bancarización

Es importante saber que si se esta en un mundo organizado en el que las finanzas se manejan a través de instituciones financieras formales que están sometidas a una serie de regulaciones y controles, la persona que no tenga relaciones formales con la banca organizada tendrá muchos problemas para tener éxito financiero.
A través de la banca se obtiene cuentas corrientes o de ahorro, depósitos a plazos y en general una serie de instrumentos que de una forma u otra están asegurados por el Estado hasta un cierto monto y que harán nuestra vida mas sencilla. Con una simple cuenta y el acceso a Internet podemos cancelar la mayoría de los servicios públicos, impuestos y transferir a las demás personas o entes con los que nos relacionamos, sin necesidad de trasladarnos de nuestra casa o trabajo, o en última instancia un cyber-café. Es interesante ver que aun existen largas colas de personas en las oficinas que prestan servicios públicos para cancelarlos, sobre todo personas mayores que no confían en la tecnología y prefieren perder horas de su tiempo con tal de tener una prueba palpable que efectuaron el pago.
Una de las ventajas de tener una cuenta bancaria es la posibilidad de obtener una tarjeta de crédito la cual en principio nos debería simplificar la vida ya que allí pueden cargarse las cuentas de muchos servicios, como el cable, la telefonía celular, cuotas del club, etc.
Ahora bien aquí viene un concepto interesante que es el estar bancarizado o no. Bancarizado se dice a aquel que tiene una relación con las instituciones financieras formales y tiene acceso al crédito que tales instituciones ofrecen, lo cual en teoría le simplifica la vida y le produce importantes ahorros. Simplemente con ver las diferencias en las tarifas de la telefonía celular cuando es en la modalidad de postpago y de prepago, la persona que domicilia los pagos en una cuenta bancaria o en una tarjeta de crédito paga sensiblemente menos por una llamada de teléfono celular que las que utilizan la modalidad de prepago, es decir, el que está bancarizado tiene la opción de elegir entre prepago o postpago el que no está bancarizado, no.
Con la bancarización el ahorro de tiempo y de dinero es importante, la diferencia entre hacer una transferencia electrónica una vez a al mes para cancelar la tarjeta de crédito a la cual le fueron cargados todos los servicios y hacer múltiples filas para cancelar individualmente los servicios aunado a los gastos de traslado puede incidir en nuestra calidad de vida.
Ahora bien con todo esto no quiero simplemente decir que es mas inteligente estar bancarizado que no estarlo, hay un aspecto mucho mas importante y que se refiere a las operaciones activas de los bancos, actualmente cualquiera que posea una tarjeta de crédito puede en caso de necesidad pedir un adelanto de efectivo con cargo a su tarjeta y esto tendrá un costo financiero relativamente alto pero absolutamente manejable dentro de los parámetros legales, si la persona no está bancarizada acudirá a un prestamista, los cuales usualmente manejan intereses 10 veces mas altos que las instituciones financieras formales, es decir, si un banco le cobra por un pagaré un 24% anual, un prestamista estará alrededor del 250% anual, lo cual crea una espiral de deuda para el deudor de la cual es muy dificil salir. Simplemente para ejemplificar cuanto saldría la adquisición de un bien o servicio en 100 dependiendo de la forma de pago. El individuo que simplemente tenga el flujo de caja suficiente pues cancela los 100 y ese vendría a ser su costo, (no estoy considerando el costo de oportunidad) si no tiene efectivo en ese momento o le es mas cómodo utilizar la tarjeta de crédito pues simplemente lo hace y en el supuesto que pague la totalidad del consumo cuando llegue su estado de cuenta de la tarjeta de crédito pues su costo también será de 100 (hasta es posible que acumule premios con ese consumo) pero ¿que pasa si se financia con la tarjeta de crédito o acude a un prestamista para cancelar el bien o el servicio?.
Cuando se utiliza la tarjeta de crédito y no se paga en su totalidad el saldo al final del mes, se está utilizando un tipo de crédito bastante costoso denominado crédito al consumo, y básicamente la institución financiera esta cobrando intereses por la utilización de un dinero que literalmente nos prestó.
El problema con las tarjetas de crédito es que nos vemos tentados a pagar el monto mínimo mensual y no la totalidad de lo que le debemos, aun cuando muchas tarjetas dicen que financian a 24 o 36 meses los consumos, la realidad es que si pagamos sólo el mínimo mensual y seguimos consumiendo, nos esperan largos años de pagar intereses a la institución financiera, lo que implica que el consumo nos costaría 100 mas varios años de intereses, es decir mucho mas costoso que en los ejemplos anteriores. Si el consumo se financia con un prestamista ya es muchísimo mas caro, simplemente si cancelamos el capital un año mas tarde el costo total seria de 350. Y por que alguien acudiría al prestamista? Pues la principal razón es porque no esta bancarizado, la segunda es que esta bancarizado pero agotó las fuentes de financiamiento formal, en ambos casos su independencia financiera se aleja cada día mas por no utilizar los canales formales de crédito.
En resumen, si estamos en un país con un sistema financiero formal, es lógico e indispensable utilizar el sistema financiero en nuestro beneficio por lo que debemos mantener relaciones con las instituciones que nos simplificarán la vida y que en determinado caso podrán proveernos los recursos que necesitamos para poder conseguir inteligentemente la independencia financiera.